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PALABRAS SUELTAS

El trazo activo, superficies texturadas, incorporación de textos, áreas difuminadas, son elementos que, desde el punto de vista formal, estructuran el cómo de los trabajos, se convierten en el vehículo que materializa las inquietudes de este autor que reúne así sus experiencias bajo el título de Gestos descompasados, por no ponerle el de Garabatos, más directo, pero portador de un dejo peyorativo que en lo absoluto responde al serio discurso formulado (...) Las huellas, el rastro, la memoria de los animales evocados, marcan el lenguaje ahora articulado con gran sensibilidad, en el que encontramos signos de aquella violencia necesaria.

El camino recorrido lo ha llevado al campo de una poética en la cual la presencia del signo, la búsqueda del símbolo, la urgencia de ir eliminando lo obvio para buscar en los entretelones de la conciencia resonancias más profundas, son rasgos distintivos (...) La obra que porta tales palabras, sitúa entre uno y otro hemistiquio abierto entre los versos, oscuridades de sexo, donde cantan los trazos de una escritura críptica. Lo difuminado del plano trabajado con el aerógrafo, va del rojo hecho denso por el negro, hasta el azul, y de nuevo hacia el color originario.

Se crean así matizadas zonas en las cuales confluyen amplias gamas de referencias al diapasón contextual donde se ejercen operaciones ‑‑por supuesto‑‑ abiertas a dilatado rango interpretativo; pero siempre guiadas por el conseguido deseo de ser eficaces en el orden plástico, logro sin el que todo quedaría en el frustrante nivel de las buenas intenciones.

(...) Sin preocupaciones por una improvisada actualización que poco tendría que ver con una orgánica necesidad vital, contemplamos al artista trabajar con rigor, seriedad y los instrumentos adquiridos en un combate con la materia pictórica, del cual sale victorioso.

Alejandro G Alonso

Crítico de arte cubano.

HUELLAS DE UNA POÉTICA SIERTA, (Exposición del artista en la Revista Revolución y Cultura. La Habana, enero 1989).

 

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Frómeta dejó su alma para siempre en aquellos carruseles y caballitos

que él y yo conocimos en la urbe en que tuvimos la fortuna de nacer,

adicionando a sus propios recuerdos la nostalgia ingenua que,

lejos de languidecer en la memoria, le ha conservado hombre y niño a la vez.

Para él dejamos abierta hoy las amplias galerías del Claustro, le dedicamos el tintineo del agua de la fuente y deseamos que su gloria alcance la estatura de las palmas reales que son el adorno principal de este jardín.


Eusebio Leal Spengler

Historiador de la Habana

(Tomado del catálogo de la exposición del artista en el Convento de San Francisco de Asís. La Habana, 1998).

 

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La Habana vigilada por la Giraldilla

y los castillos de los príncipes, guarda en su reinado de belleza,

una de las tradiciones conservadas allí

como en muy pocas ciudades del mundo.

El apego al dibujo y a la perseverancia de la piedra y al intaglio

los ha hecho grandes maestros de la pintura.


El dibujo, padre y madre del arte del gesto,

es mantenido por estos grabadores en sus haberes de artistas

y en sus deberes de profesores.

(...) Gilberto Frómeta es hijo de esos últimos valores del amor al trabajo

que aún se conservan en la isla bella.


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La estada del Maestro Frómeta en Maracaibo

hizo pulsos de admiración en el estado artístico venezolano.

Llegado con el conocimiento de las escuelas severas de la Isla de Cuba

(...) azotando las telas con un hacha de viento y

terminando sus cuadros en una hilvanación del inicio de otra obra que perfecciona

y amplía el lenguaje de las constelaciones y concatenaciones

(...) hasta imitar en las paredes de las exposiciones un estado físico del trabajo,

del intelecto y la virtud de saber la ubicuidad del tiempo (...)


Dos exposiciones preparó para Venezuela

(...) ambas extraordinarias, testimoniales de la gran pintura cubana,

aciertos de un gran artista, un hombre pulcro y severo, auténtico,

dominando por todavía el poderoso numen de los dioses de la creación

donde la fe es devota del sentido

y donde el sentido adquiere forma para así de vez en cuando

sabernos justos y tocar el amor.

 

Hugo Figueroa Brett

Poeta y ensayista venezolano.

(Tomado de los catálogos de las exposiciones:

EL VORAZ ESPACIO DEL SILENCIO

Galería Díaz Mancini, Caracas, Venezuela y

LA HABANA - MARACAIBO - LA HABANA

Galería La Acacia, La Habana, Cuba.

Ambas en 1991.

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